La Hoja que No Queria Agua
15.01.2013 14:50“ Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí
mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y
los echan en el fuego, y arden.” Juan 15:4-6
Había una vez un árbol muy joven, del que se esperaba que, cuando fuera mayor, diera hermosos y buenos frutos. Se había puesto en ella, grandes esperanzas. Este árbol tenía cuatro hojas, cuatro bonitas hojas, verdes y resplandecientes. Un día, las cuatro hojas tuvieron una reunión de grupo. Una de ellas, la que estaba más arriba en el árbol, les dijo a las otras tres:
– Yo quiero seguir unida al mismo árbol que vosotras. Pero, en lo sucesivo, no quiero recibir el agua, porque está muy fría, ni el sol, porque quema. Por eso, me voy a poner un paraguas, que abriré, cuando llueva o haga sol, y cerraré cuando haga fresquito. A las otras tres hojas, no les pareció bien la idea, pues se dieron cuenta de que,cuando abriera el paraguas, no sólo no iba a recibir ella el agua ni el sol, sino que tampoco se los dejaría recibir a ellas.
La hoja del paraguas no les hizo caso y, efectivamente, se puso el paraguas, que abría, cuando llovía o hacia sol, y cerraba cuando hacia fresco. Al cabo del tiempo, aquellas cuatro verdes y hermosas hojas empezaron a languidecer y a marchitarse hasta que, un día, las cuatro, secas, cayeron al suelo y fueron arrastradas por el viento, y el árbol joven, del que se habían esperado tan buenos y hermosos frutos, quedó convertido en un tronco seco.
La historia anterior es un vivo ejemplo de que no importa cuántas personas estén a nuestro lado, cuan popular seamos, cuantos nos aprueben, acepten y aplaudan nuestros amigos; no importa cuán lejos hayamos llegado y cuantas ideas brillantes hayan pasado por nuestra cabeza, sin Jesucristo, El Hijo de Dios, su vida se secará.
Dios nos ha dado lo más valioso, a su Hijo amado (“ El que me aborrece a mí, también a mi Padre aborrece.” Juan 15:23) (“Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.” Juan 6:37), ( “para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que le envió.” Juan 5:23). Quizá nuestro lector ha oído el Evangelio, siente el peso de sus pecados, la necesidad de arrepentirse y aceptar el perdón de Dios, pero teme que tal decisión lo comprometa a llevar una vida de ermitaño, triste y sin gozo. Usted se equivoca, o más bien, Satanás, el enemigo de su alma, trata de impedirle, mediante tales pensamientos, acudir a Jesús. Intenta retenerle aturdiéndole con placeres pasajeros que tratarán de cubrirlo por un momento como el paraguas de la historia, pero esos placeres a menudo tienen un sabor amargo; y de aventuras en desilusiones. Como ya lo sabe, separados de Él, nada podemos hacer. Muy pronto se verá cansado, y fracasará miserablemente toda su vida por no poner su fe y confianza en aquel que es ÉL único que puede salvarle de sus pecados, de la ira de Dios por sus malas acciones, y por no valorar el regalo que Él le ofrece a través de Su Hijo Jesús. Permita que Él le limpie y le sane.
Querido amigo y amiga, Dios le ama y Èl quiere ver su vida florecer, El desea lo mejor para ti, Él está definitivamente más interesado en su vida que lo que usted mismo jamás podría estarlo. El Dios del universo anhela tener una relación íntima con usted. Él no quiere que perezca. Él le ha dado libertad para escoger. Usted puede escoger un camino que ante su opiniòn y perspectiva, le parezca correcto al no tomar en cuenta a Su Creador en su vida y lo que le está diciendo para su verdadero bienestar en las Santas Escrituras, sin embargo, al final son caminos de muerte.(Proverbios 16:25). Como aquella hoja que tomó la mala decisión de rechazar el agua, su vida y futuro, marchitó y se secó. Permita, por lo tanto, que su hijo
Jesucristo, obre en usted la verdadera felicidad, una que va más allá de placeres temporales y consecuencias a situaciones que deseará no hubiesen acontecido si hubiera escuchado lo que el Dios Sabio del universo le ha estado diciendo.
Jesucristo le espera con los brazos abiertos, Su Palabra nos insta a buscarle mientras pueda ser hallado, porque cualquier momento podría ser demasiado tarde para usted. (Isaías 55:6-8). El tiempo pasa… Deténgase ahora, escuche la voz de su conciencia y la advertencia de Aquel que le dice: “¿Qué aprovechará al hombre si ganare todo el mundo, y perdiere su alma?” (Marcos 8:36).
Ante Dios usted está muerto en sus “delitos y pecados” (Efesios 2:1). Crea en el Hijo de Dios, acepte sin tardar la vida eterna, ese don gratuito. Entonces podrá aprovechar “las abundantes riquezas de su gracia (regalo no merecido)” y andar “en vida nueva” (Romanos 6:4). Jesucristo hoy le dice, si crees en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.” Juan 7:38, Dios le amó tanto que dio a su Hijo único para que si usted confia y depende sólo en Él para la salvación de todo su ser, no se pierda, sino que tenga vida eterna.” Juan 3:16.
En la historia de hoy, la hoja que no quería agua le representa a usted. Hubo nuevas noticias para el resto del grupo que si valoraba y apetecía el agua de vida, pero cuando ellas aceptaron el tomar una mala decisión, aceptaron el rechazar el agua del perdón de Dios, hubo malas noticias. Hoy, nos gustaría que usted reciba, entonces, dos noticias, que son cruciales, y que si usted las atiende con honestidad, transformaran su corazón: Sí, Buenas Y Malas Noticias ¿Cuál Quiere Primero? Responda con un corazón sincero: ¿Alguna vez ha mentido (aunque sea una sola vez)? ¿Ha robado (el valor es irrelevante)? Entonces es un ladrón mentiroso. ¿Malas noticias, cierto? Hay más. ¿Ha tenido relaciones sexuales fuera del matrimonio? Si es así, entonces es un fornicador. Jesús dijo: "Todo aquel que mira a una mujer para codiciarla, ha cometido adulterio con ella en su corazón." Si ha odiado a alguien, la Biblia dice que usted es un homicida. Además, usted tiene una conciencia (con-ciencia significa, "con conocimiento"), esto quiere decir que cuando peca, lo hace con conocimiento de que está mal. ¿Teniendo en cuenta que Dios es perfecto, y que Él ha visto cada uno de sus pensamientos, al estar ante Él en el Día del Juicio, será inocente o culpable? Usted sabe que será culpable, y terminará en el infierno. Tal vez no lo crea, entonces hay más malas noticias para usted, porque aunque no lo crea va a suceder.
Entonces, esto nos lleva a las buenas noticias: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros." Jesucristo tomó el castigo, y luego resucitó de los muertos y derrotó la muerte. Estas son buenas noticias, porque si se arrepiente y confía en Él, Dios le perdonará y le dará la vida eterna, ¡qué mejor noticia puede haber! ¿ Reconoce con sinceridad que ha tratado de dejar a Dios de un lado, haciendo las cosas a su manera, cryendose más sabio que su Amante Salvador y Creador?? ¿ Reconoce que ha sido esa hoja que no quería agua??Puede orarle ahora con sinceridad: “Señor Jesús, te necesito. Gracias por haber muerto en la cruz por mí. Perdóname y límpiame. En este mismo instante confío en ti como Salvador Y señor de mi vida. Hz la clase de persona que tú quieres que yo sea. En el nombre de Cristo. Amen”
Por lo tanto, lea la Biblia diariamente y obedezca lo que lee. Permanezca unido a ÉL por medio de Su Palabra todos los días, como el pámpano lo está a la vid, y como la hoja que reciba diariamente el agua de vida de Jesucristo! Dios nunca le fallará. Lo invitamos a ver este breve video de menos de 7 minutos con una verdad vital cambiará su vida, www.youtube.com/watch?v=AmMiYAZ9WLU&feature=youtu.be